En la primera parte de nuestra serie sobre la gestión del punto de venta, establecimos que el equipo humano es el corazón de nuestra óptica. Ahora, vamos a vestir nuestro negocio para el éxito, porque antes de que un cliente pueda apreciar la profesionalidad de nuestro equipo, debemos convencerle de que cruce nuestra puerta.
La fachada es la primera imagen que el viandante percibe de nosotros. Debe ser un imán que capte su atención en un entorno urbano saturado de estímulos. Esto implica una gestión cuidada de tres elementos…
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